México acelera transición energética para impulsar parques industriales

Como parte de la agenda del Plan México, este año se anunció la construcción de 103 nuevos parques industriales distribuidos en 52 municipios de 17 estados de la República, con un horizonte de desarrollo proyectado hacia 2030. 

De acuerdo con estimaciones de la Asociación Mexicana de Parques Industriales (AMPIP), estos proyectos requerirán alrededor de 2.5 gigavatios (GW) de capacidad instalada para satisfacer sus necesidades operativas. 

A esta cifra se suma la demanda de los cerca de 500 parques industriales ya existentes, que en conjunto necesitarán 13.2 GW adicionales al cierre de 2025.

Actualmente, el 90% de estos complejos opera bajo un esquema de suministro básico, por lo que el fortalecimiento de las redes de distribución y transmisión será crucial para sostener el ritmo de crecimiento industrial.

Generación energética in situ: estrategia aliada para los parques industriales

Para empresas como Enlight, los esquemas de generación en sitio bajo la modalidad de autoconsumo (centrales eléctricas con una capacidad igual o mayor a 0.7 MW), adquieren un papel estratégico ante la demanda eléctrica y el nearshoring. 

La firma detalló que estos sistemas podrían aliviar la presión sobre la red eléctrica, permitiendo que funcione como un complemento del suministro y no como la única fuente de abastecimiento.

“Los parques pueden consumir energía renovable generada en sitio y contar con el respaldo de la red eléctrica nacional para complementar su suministro eléctrico; o bien, operar de manera autónoma ante interrupciones o cortes totales en la red pública, contribuyendo a garantizar la continuidad operativa de las empresas que albergan”.

Beneficios operativos de las microrredes

Otra estrategia que Enlight destaca es la microrred, es decir, un sistema energético desarrollado por proveedores especializados, que integra tres componentes principales bajo una estrategia de operación coordinada. 

“Estas permiten que los parques industriales se consoliden como ecosistemas energéticos integrales, capaces de gestionar localmente su generación, consumo y respaldo energético”. 

La compañía detalló que este tipo de sistemas se compone, en primer lugar, de la generación en sitio a partir de fuentes renovables como la solar fotovoltaica. Dicha acción permite reducir la dependencia del suministro externo, favoreciendo la participación de energía limpia en la operación industrial.

En segundo lugar, incorpora sistemas de almacenamiento de energía en baterías (BESS) que aportan estabilidad al suministro y permiten cubrir picos de demanda o contingencias operativas. 

Finalmente, las microrredes integran plataformas de control y monitoreo inteligente, capaces de:

   °Optimizar el uso de la energía almacenada

   °Gestionar la interacción con la red pública

   °Responder de manera dinámica y eficiente a las condiciones del sistema eléctrico

“Incluir estas soluciones en la industria, ya no sólo responde a criterios de reducción de costos operativos. Hoy son un habilitador clave para alcanzar seguridad energética, resiliencia operativa y transición hacia una producción limpia y confiable”.